Translate

viernes, 10 de febrero de 2023

La Ruta Vadiniense un camino a Santiago realmente olvidado. LEONOTICIAS

 Siro Sanz García

SIRO SANZ GARCÍA Cistierna

La Ruta Vadiniense el único camino que es a la vez jacobeo y lebaniego (Santo Toribio- Potes), es la joya de la corona, el florón del turismo de patrimonio histórico, naturaleza y espiritual que recorre la montaña oriental leonesa en dos direcciones de Norte a Sur y de Sur a Norte. La realidad material de la Ruta Vadiniense, discurre por un trazado dos veces milenario. Una calzada romana que sin embargo figura en la lista roja de Hispania Nostra.

Remonta su origen a la entrada de la comarca en la Historia cuando el emperador Augusto decidió en 26 a. C someter a los cántabros. Su nombre: Ruta Vadiniense, queda plenamente justificado por recorrer de Norte a Sur el territorio ocupado por la tribu cántabra de los vadinienses, una de las ocho que formaban la nación de los cántabros; tribu que entonces ocupaba el área de la actual montaña oriental leonesa. Transcurre por paisajes espectaculares, donde en los siglos VIII -X se generó el embrión de la nación española y portuguesa; por ende el de todas aquellas que de nosotros proceden en América, renuevo del fecundo tronco de cántabros y astures.

Esa historia ha quedado plasmada en lugares de un alto valor cultural y medioambiental. Su abandono en: paneles quemados por el sol; otros en el suelo desde hace más de un año; invasión de maleza; destrucción de algunos tramos, muestra el desprecio hacia un importante bien patrimonial por parte de las autoridades que nos pastorean; eso sí, siempre prestos a darnos la tabarra sobre promoción turística y cultural. No estaría mal que dejen de hablar tanto de turismo y decidan hacer algo por el mismo, por ejemplo, ayudar más a la Asociación Ruta Vadiniense en asuntos que ellos no pueden llevar a cabo, como por ejemplo, implicarse en la realización de sendos albergues en Portilla y Riaño.

Otros pueblos y ayuntamientos de León y el resto de España, se matarían por tener un camino de Santiago que pase por su territorio. Qué ocurre en la montaña oriental leonesa, donde los prohombres que nos representan  aún no son conscientes o desconocen la riqueza de su patrimonio, en este caso, un camino de vital importancia, pues vertebra el turismo senderista, conchero y lebaniego que atraviesa seis municipios y nos hermana con la Comunidad Autónoma de Cantabria. Una ruta clave para el desarrollo del turismo en la montaña oriental. Con sana envidia contemplamos la promoción del Vexu Camin por parte de todos los ayuntamientos por los que discurre ese otro histórico camino. 


El camino vadiniense en el tramo de la Entrecisa- Crémenes. Al fondo la masa caliza de las Pintas. La realidad material de la Ruta Vadiniense, discurre por un trazado dos veces milenario. Una calzada romana que sin embargo figura en la lista roja de Hispania Nostra / Siro Sanz

 

viernes, 3 de febrero de 2023

EL VALOR DE VIVIR EN LA MONTAÑA ORIENTAL LEONESA. LEONOTICIAS

 Siro Sanz García

Las políticas que nos aplican desde hace más de 30 años los dos partidos políticos mayoritarios, tanto monta, monta tanto, han llevado a la montaña y a los montañeses a un estado solo comparable al de algunas especies en peligro de extinción: el oso y el urogallo. Comienza la campaña electoral y los políticos locales, pendientes de los intereses de sus partidos, volverán a vendernos el país de Jauja y a repetir las promesas incumplidas de anteriores campañas.

Sin embargo, las vías pecuarias que ellos llaman carreteras seguirán siendo eso: caminos para animales sin herrar. Las carencias en sanidad y educación continuarán afectando a las familias que aquí resisten. El lobo hostigará y atacará la cabaña ganadera y nadie hará nada por los ganaderos. La agricultura en la montaña que ahora se pregona en FITUR como SIPAM, más bien sin- pan (Sistema importante de Patrimonio Agrícola Mundial), es PURA MENTIRA.

En la montaña el bosque invade la pradería, reclamando lo que le arrebatamos escaliando terrenos hace más de 1000 años. La agricultura ha desaparecido, no se siembra nada, únicamente algún huerto familiar. En aras de esa nueva sectaria religión ecologista de la Pachamama tan querida por el Papa Francisco I, nos obligan a aceptar limosnas a cambio de abandonar una de las pocas actividades que reportaban ingresos a nuestros concejos: la caza.

Hace tiempo, por el declive de la ganadería perdimos el arriendo de puertos al ganado del extremo. Se conceden licencias como churros para perpetrar desastres en montes y tierras de labor. Estudios de impacto medioambiental de chichinabo, permiten parques solares y molinos por doquier, ya están muy cerca de nosotros, en la Robla.

Las depuradoras en las cuales se invirtieron tantos fondos europeos seguirán sin funcionar. Se repite en cada nevada el aislamiento de muchos pueblos, apagones y ausencia de internet.

Pero, no todo está perdido, debemos tener valor y resistir como resistieron ante dificultades aun mayores nuestros antepasados. Se tenían a ellos mismos y se valieron de la organización concejil para hacer frente a las duras condiciones climatológicas, alimentarias y a las pretensiones de sus señores naturales.

Vivimos una época marcada por la globalización que nos desarraiga, que destruye nuestra pertenencia a la tierra y al antiguo reino de León. Es vital para nosotros reconocernos como leoneses, sin excluir por supuesto a nadie y, arraigarnos de nuevo en nuestra tierra, identificarnos con nuestro pasado concejil, presente en las juntas vecinales que tenemos que reactivar, hacer más independientes de los partidos políticos, más reivindicativas y leonesas.

Miremos muy bien a la hora de votar, quién defiende León y quién no. Con valor amparemos nuestra tierra votando a quién o quiénes luchan por León. El romano encarnaba en símbolos tangibles y materiales valores espirituales. El Tirso, un bastón rematado por una piña significaba la fuerza vital y el valor en el combate, se cristianiza con San Tirso (28 de Enero).

En la montaña encontramos San Tirso en Tierra de la Reina junto a la calzada, camino del Monte Vindio (Picos de Europa), en Boca de Huérgano y Barniedo. En Sobrepeña (La Ercina), el titular de la parroquia es San Tirso, muy cerca se encuentra el Castro de la Peña, la calzada y Entrecisa de la Gobia. Protegidos por las montañas que salvaron a España y con valedor tan poderoso el futuro nunca debe asustarnos si nos mantenemos firmes en nuestras raíces leonesas

 Ermita de S. Tirso en Boca de Huérgano. El romano encarnaba en símbolos tangibles y materiales valores espirituales. El Tirso, un bastón rematado por una piña significaba la fuerza vital y el valor en el combate, se cristianiza con San Tirso -28 de Enero / Siro Sanz