La semana pasada del 15 al 20
recorrían el camino Vadiniense en dirección a Santo Toribio de Liébana la Asociación de Amigos del Camino de Santiago
de Navarra, cincuenta y cinco personas que durante tres días se alojaron
en el Hotel El Cruce de Cistierna donde
tenían al menos dos comidas diarias y la pernocta. Caminaban por la mañana en etapas
de unos 17 km acompañados desde Villacidayo hasta Riaño por dos esforzados
miembros de la Asociación Ruta Vadiniense de Cistierna: Goyo y Felix. Nos ponderaban los navarros la calidad del hotel cisterniego, la
hospitalidad y buena acogida de los leoneses y la belleza del camino entre
choperas y verdes prados de la vega del Esla, en contraste con el otro que discurre por el sarraceno secarral
meseteño de Castilla la Vieja. En el Puente de Mercadillo (Sorriba del Esla) impresionados por la cordillera que se
vislumbra tras la mole de Peñacorada y Pico Moro se les explicó que iniciaban
los tramos más señeros de la Ruta Vadiniense por las asperezas de nuestros montes. No se limitaron los peregrinos a
caminar, las tardes se ocuparon en visitas culturales al Museo del Ferroviario
de Cistierna; Museo de la Siderurgia de Sabero y Museo Etnográfico de Riaño con un paseo
en barco por los “fiordos riañeses”; caro el billete, deben pensar que son los fiordos noruegos. Pernoctaron en
Riaño antes de traspasar la cordillera por Remoña. Poco
a poco el camino Vadiniense es más frecuentado y escogido por peregrinos que
buscan alternativas al Camino Francés. Es
un turismo que debe ser mimado en orden a: revitalizar la maltrecha economía
montañesa; el conocimiento de
nuestra tierra; gastronomía; cultura y espiritualidad. La Asociación Ruta
Vadiniense de Cistierna hace lo que puede y más de lo que puede en difundir, señalizar, panelizar y en
algunos casos acompañar a estos grupos cada día más numerosos de peregrinos que
apoyan la única industria autóctona que existe por sí misma: el Turismo. Por
eso reclamamos a las autoridades
concejiles atención en aspectos a los cuales nos es imposible llegar, uno
de ellos es la limpieza del camino que en algunos lugares deja mucho que
desear. El tramo del Pajar del Diablo es uno de los más espectaculares de la
Ruta Vadiniense, al paisaje se añade la potencia de un camino milenario engastado en piedras que gritan nuestra historia.
A estas alturas del mes de Julio el tramo comprendido entre Valdoré y Crémenes
presenta un aspecto deplorable por la hierba que lo cubre y las ramas que lo
atraviesan enmascarando los límites del mismo; destacamos la pulcritud de tramo correspondiente al Concejo de Sabero. Por lo tanto y con el debido respeto a las autoridades concejiles mayores y menores que ostentan las necesarias competencias en el municipio de Crémenes, rogamos: -no estaría mal que dejen de hablar tanto de turismo y decidan hacer algo por el mismo-. Un
operario, una desbrozadora y dos días bastarían para ahorrarnos el sonrojo que
pasamos al recorrer el tramo Valdoré-Crémenes, con las buenas gentes de Navarra; más que entrar a la Montaña
Oriental parecía que lo hacían a la Selva del Orinoco. Otros pueblos y ayuntamientos de León y el resto de España se matarían por tener un camino de Santiago que los recorra de Norte a Sur. Qué ocurre en la Montaña de Riaño donde los políticos que nos representan aún no son conscientes de la riqueza de su patrimonio, en este caso, un camino de vital importancia pues vertebra el turismo senderista y conchero comarcal que atraviesa seis municipios y además nos hermana con la Comunidad Autónoma de Cantabria. ¡Apañados estamos con tanta secta política!
En el Puente de Mercadillo (Sorriba del Esla) impresionados por la cordillera que se
vislumbra tras la mole de Peñacorada y Pico Moro se explicó a los peregrinos que comenzaban
los tramos más señeros de la Ruta Vadiniense por las asperezas de nuestros montes. (Foto: Siro Sanz)
El tramo del Pajar del Diablo uno de los más espectaculares de la Ruta Vadiniense que discurre por el Ayuntamiento de Crémenes, al fondo la mole de Las Pintas. En la foto inferior La Entrecisa uno de los monumentos romanos más importantes de la Montaña. Crémenes ostenta uno de los patrimonios históricos más importantes y desconocidos de la Montaña Oriental Leonesa (Fotos: Siro Sanz)